Con una votación de cuatro a tres a favor, el intendente José Perea logró que sean vetadas la ordenanza 040 y 041 con lo le permite continuar con el poder de disponer de los fondos para la realización de obras y que las mismas no pasen por el Concejo Deliberante.
La ordenanza 040, que prevé que el uso de los fondos que disponga la comuna de un piso mínimo de 5 mil pesos y un máximo de 900 mil pesos y la ordenanza 041 las obras son autorizadas por la Oficina de Planificación.
Los votos de Marita Schbbemler , Martín Garay y Ramón Ocampo ambos del partido PG por Catamarca permitieron la continuidad de los superpoderes. Esta decisión provocó la reación de los autoconvocados y desocupados, que insultaron los ediles oficialista.