En medio de un escándalo mediático, Julio Grondona fue reelecto anoche por octava vez consecutiva como titular de la AFA, aunque Daniel Vila también se autoproclamó presidente en una asamblea paralela.
Como se esperaba, Don Julio recibió el apoyo de los 46 delegados habilitados. No estuvieron presentes los representantes de Independiente, Vélez y Atlético Rafaela.
El veterano dirigente, de 80 años, que volvió a la AFA después de dos meses, agradeció con un escueto discurso, mediante el cual se comprometió a seguir trabajando por los clubes, las ligas y todo el fútbol. "Agradezco a todos por este final feliz. Trataremos de mejorar en un todo", dijo.
Luego de la votación, el secretario de la AFA -José Luis Meiszner- se refirió a Vila, sin nombrarlo. "Ese señor debe entender que no puede entrar a esta casa con la gendarmería. De prepo, no", insistió Meiszner.
La Asamblea General Ordinaria había comenzado a las 19.45, 15 minutos antes de lo previsto inicialmente
mientras que en la calle Vila esperaba -infructuosamente- ingresar al edificio. "
"Será nula", dijo Vila, en referencia a una nueva elección de Grondona, y ratificó su postura de continuar con las diligencias judiciales para ser reconocido.
Los representantes que acompañaron al titular de Independiente Rivadavia de Mendoza realizaron otra Asamblea en el segundo piso. Allí, Vila recibió el voto de 52 clubes, ya que los otros dirigentes tampoco pudieron ingresar.
El empresario mendocino reclamaba la participación en la Asamblea principal y también la presentación de su candidatura, avalado con un escrito judicial, que no fue recibido por ningún empleado de la AFA. Mientras Vila aguardaba para entrar, y acusaba a la policía ante los medios por su pasividad, se apagaron las luces del hall central del edificio.
¿Qué pasará ahora? La polémica continuará en la Justicia que deberá definir quién tiene la razón. De todas maneras, Grondona fue elegido por el sistema que ordena el estatuto de AFA.