HOY, TODOS SON SOSPECHOSOS EN EL CRIMEN DE LONDRES

Se espera una identificación positiva del cuerpo en estos días, pero mientras tanto nadie sabe absolutamente nada. Para los investigadores, “hoy todos son sospechosos”.
El crimen podría haber sucedido al menos una semana antes del hallazgo, pero curiosamente nadie sabe nada.
Mientras la investigación continúa en Londres, tratando de desentrañar el misterio que rodea al hallazgo de un cuerpo calcinado y decapitado, la Justicia decidió enviar a un funcionario de esta Capital, para colaborar con la fiscal y el juez de Belén.
Se trata del fiscal de instrucción Nº 3, Alejandro Dalla Lasta, quien se encuentra desde el sábado en la localidad londrina.
En tanto, en la jornada de ayer se llevó a cabo una serie de procedimientos, en procura de encontrar un hilo conductor que oriente la pesquisa.
Hermetismo
Sin embargo, los investigadores se encontraron con un inusual hermetismo por parte de prácticamente toda la “comunidad hippie”, que se encontraba en las inmediaciones de las ruinas de El Shincal.
En estos días, esa es la situación en esa tranquila localidad del departamento Belén, donde “todos son sospechosos” del crimen.
Por el momento, la medida de mayor urgencia es identificar el cuerpo y establecer si en definitiva se trata de Sebastián Musacchio, el joven oriundo de Comodoro Rivadavia, que estaba desaparecido desde el 23 de julio último.
Documentación
Para ello, sus padres aportaron documentación para comparar las impresiones digitales con las del cadáver, aunque es de remarcar que las conclusiones de la pericia genética serán las que den una respuesta definitiva.
Las autoridades esperan contar en estos días, al menos, con una identificación positiva del cuerpo, para al menos darle un punto final a la incertidumbre de la familia Musacchio.
Calcinado
La autopsia realizada el mismo viernes estableció que la muerte dataría de al menos una semana antes del hallazgo del cuerpo.
La víctima habría recibido un fuerte golpe en la cabeza, luego de lo cual, el o los asesinos le prendieron fuego, posiblemente dentro de su carpa, cuyos restos también fueron encontrados.
En tal sentido, las autoridades indicaron que los restos no presentaban un avanzado grado de descomposición, sino que fue la calcinación lo que provocó el macabro cuadro en el que fue encontrado.
Ello explicaría, además, por qué el cuerpo quedó mutilado, pues el fuego habría reducido a cenizas gran parte de los huesos, facilitando de ese modo el accionar de los animales, que posteriormente lo habrían decapitado.