Hoy se realiza la audiencia de control de garantías y, por pedido de la fiscal Marta Nieva, seguiría detenido por haber entorpecido la causa. Alejandro de las Cuevas, el ciudadano uruguayo que fue acusado por el juez Rodolfo Cecenarro como autor de las amenazas de muerte que recibió el último 25 de mayo en esa ciudad, se presentó ante la Justicia de Andalgalá.
“Se presentó y desmintió toda la denuncia que se le hizo, y citó varios testigos”, relató la funcionaria judicial, quien comentó que “se le explicó que como estuvo tanto tiempo desaparecido, se le va a mantener la detención, lógicamente que mañana (por hoy) se la voy a pedir ante el juez de Control de Garantías (Escipión Scidá)”.
Según solicitará la fiscal, De las Cuevas quedará detenido hasta tanto lleguen los informes del Registro Nacional de Reincidencia y de la División de Antecedentes de la Policía provincial.
Si bien el ambientalista no fue declarado en rebeldía, Nieva dijo que hubo “obstaculización de la Justicia. Me impidió a mí actuar al no encontrarse, y eso que se lo había notificado y allanado en varios lugares”.
Sobre los motivos de su fuga, en la primera declaración que hace De las Cuevas ayer, fue que “vio tan grande mentira del juez que tuvo miedo, y que los testimonios de la gente que lo vieron faltan totalmente a la verdad, por lo tanto ante ese temor, aparte que salió en los diarios, él se asustó y se escondió, pero cuando vio que las cosas estaban un poco más tranquilas se quiso presentar”.
En ese sentido, la fiscal confió que la semana pasada la abogada del ciudadano ya había anticipado que se iba a presentar espontáneamente en estos días, tal como ocurrió ayer en horas de la mañana en la Fiscalía, donde prestó declaración antes de quedar detenido en la Comisaría Departamental de andalgalá.
“No quiso decirnos dónde estuvo, pero dijo que siempre estuvo acá, que solamente estaba escondido, aunque lógicamente no nos dijo adónde. Pero aseguró que no salió del país en ningún momento”, se explayó la fiscal.
Finalmente, apuntó que si bien es un delito excarcelable debido a la pena, prevista de 2 a 4 años, pero ante el antecedente que trató de eludir la acción de la Justicia, se le podría dictar la prisión presentiva, porque los indicios que lo podría volver a hacer siguen presentes.